Pensaba en el misterio de gozo, Jesús es perdido y hallado en el templo, cuantas veces perdemos a Jesús, nos alejamos de su lado, el pecado nos llama y es más fácil, pero Dios padre misericordioso nos busca y no nos deja desviarnos, nos hace retornar a Él porque somos de Él, de Él venimos y a Él debemos retornar, para vivir juntos toda la eternidad.